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martes, 19 de enero de 2016

AMADEUS - 45


Tiempo de estrellas


Con octubre de 1996 se abría la temporada de las estrellas, que diría Nuria Fontova.
Jesús López Cobos era una batuta aclamada entre Barcelona y Madrid.
El Teatro de la Maestranza de Sevilla publicaba su Programación, que incluía Ópera, Conciertos, Danza, Zarzuela y Grandes Intérpretes.
En el CD mensual venían las Sinfonías n. 5 y n. 7 de Beethoven, en que la Orquesta es la gran protagonista. Con este motivo, se publicaba un extraordinario documento biográfico y literario "recordando a Beethoven". Y un retrato documental sobre Carlos Kleiber, el director que había llegado a ser mítico por sus interpretaciones cargadas de sensibilidad artística y de técnica.
En este comienzo de temporada 1996-97 había una promesa muy esperanzada para los amantes del bel canto, ya que en toda Europa se programaban títulos muy interesantes: Fígaro, El Príncipe Igor, Ombra Felice, Fausto, Edipo rey, Boris Godunov, El anillo del Nibelungo, Otelo...
Isaac Stern, toda una vida dedicada a la música, era un violinista con magia, a sus 76 años.
Sobresalían, también, las Orquestas del Nuevo Mundo: Nueva York, Chicago, Los Angeles, Boston, San Francisco y Montreal.
En el mundo de la ópera se llegó montar AIDA de forma espectacular, con reproducciones a tamaño casi real, con un equipo técnico de 500 personas y con 1.500 actores en escena.

Alfonso Gil González
Sinfonía n. 5 de Beethoven


Sinfonía n. 7 de Beethoven

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