Valores de la música
Dejamos Francia y nos adentramos en Europa de la mano de Vivaldi.
Durante un buen número de años, en el siglo XIX, fueron muy corrientes en el panorama europeo las “fantasías” de tipo virtuosístico, escritas sobre temas populares o motivos de autores famosos, sobre todo, de óperas. La mayoría de estas obras ha quedado relegada al olvido, pues no eran más que un pretexto para lucir la buena técnica y la brillantez de sonido de los solistas. Sin embargo, algunas de ellas merecen ser recordadas. Sobre todo, las suscritas por compositores como Liszt o CHOPIN. En dichas obras, aun en las más superficiales, siempre se encuentran valores indudables. La Fantasía sobre temas populares polacos, escrita para piano y orquesta, es obra de juventud, y en ella encontramos un ambiente muy parecido al de los dos “conciertos para piano”·. La orquesta es un fondo sonoro sobre el que realiza el piano sus arabescos que adornan las bellas melodías. Esta “fantasía” la versiona la Orquesta de la Sociedad de Conciertos del Conservatorio de París, bajo la dirección de Stanislao Kroachesky.
Claudio Arrau, con la Orquesta Filarmónica de Londres, dirigida por Eliau Imbal, interpreta, de Chopin, su Doble concierto para piano y orquesta “CRACOVIA”, OP. 14.
De JOSEPH LAHNER, Vals, de la op. 103. interpretado por el Conjunto Bella Musica de Viena.
De BRAHMS, Canciones de amor op.52 para 4 voces con piano.
Cuarteto para 4 voces con piano, op. 64.
Alfonso Gil González
Rondó del Concierto CRACOVIA
Vals op. 103 de Lanner
Canciones de amor
